Realidad aumentada en las redes sociales

La realidad aumentada está logrando hacerse un hueco en las redes sociales debido a la integración cada vez mayor de la tecnología en estos canales. Por ello, negocios de cualquier tamaño ya pueden plantearse incorporar este tipo de contenidos en sus estrategias.

La tecnología de la realidad aumentada consiste en superponer imágenes generadas por ordenador en la realidad que rodea al usuario. De este modo, se “aumenta” la realidad con experiencias más ricas. 

Quizás el ejemplo más famoso de realidad aumentada hasta el día de hoy sea el popular Pokemon Go. En este juego, los usuarios buscaban imágenes de estas criaturas virtuales en lugares reales de sus ciudades. 

Hoy, la realidad aumentada en redes es ya cotidiana, como los filtros de Snapchat e Instagram que añaden elementos (unas orejas de perro, maquillaje, unas gafas de sol…) a las fotografías o vídeos de los usuarios.

Pese a que ambos son ejemplos del uso de esta tecnología para el entretenimiento, las marcas están comenzando a comprender el verdadero potencial de la realidad aumentada para el marketing. 

Así, en la actualidad ya existen diversas formas en las que es posible utilizarla en redes sociales para lograr más atención hacia sus productos o servicios y hacer crecer un negocio. 

¿Cómo se usa la realidad aumentada en las redes sociales? 

Ya hay estudios que estiman que, tan pronto como 2022, el mercado de la publicidad con realidad aumentada moverá alrededor de 13.000 millones de dólares. 

Lo cierto es que las plataformas sociales ya están invirtiendo grandes cantidades en desarrollar e integrar esta tecnología. Por ejemplo, Instagram está experimentando con añadir la posibilidad de que los usuarios prueben productos de forma virtual. 

Algunos de los usos ya disponibles incluyen:

Lograr mayor alcance con efectos propios

Los efectos de Instagram (popularmente conocidos como filtros) son una de las aplicaciones de realidad aumentada más populares, y muchas empresas ya se han dado cuenta de su potencial para el marketing. 

Es posible crear tu propio efecto en Instagram o Snapchat, de modo que realce tu branding y sea atractivo y fácil de compartir en redes, multiplicando su alcance. 

Marcas como Pescanova, Domino's Pizza o H&M ya hacen que sus seguidores se diviertan colocando sobre su propia imagen unos bigotes de unos langostinos, unas pizzas a modo de ojos o un efecto psicodélico inspirado en la colección de moda.

Probar productos

Si bien es cierto que es difícil competir con la experiencia en una tienda física, muchas empresas están optando por permitir que sus clientes prueben sus productos a través de realidad aumentada. 

Algunas marcas también han desarrollado herramientas para que sus clientes prueben productos de maquillaje, gafas de sol e incluso diferentes modelos de muebles para las habitaciones de una casa. 

Ventajas de usar realidad aumentada en las redes sociales

Mejorar el engagement

Las imágenes estáticas y los vídeos son ya contenidos comunes en el feed de los usuarios de redes sociales. 

En un contexto de atención dispersa y scroll continuo, generar una experiencia de realidad aumentada llama la atención del usuario y la retiene durante más tiempo. Además, multiplica el engagement, incitando a usar la realidad aumentada por diversión. 

Así, las aplicaciones de realidad aumentada como los efectos de Instagram saltan de usuario a usuario de forma casi viral.

Más contenido compartido

La realidad aumentada proporciona una experiencia innovadora e inmersiva a los usuarios. Se trata de crear contenidos altamente dinámicos que, además, interesen a tu público y comprador objetivo y que las personas vayan a querer compartir con sus amigos. 

Potencia las compras impulsivas

Esta tecnología actúa como un puente entre el mundo virtual y la realidad, permitiendo al usuario imaginar cómo un producto puede integrarse en su día a día y en su apariencia. 

Se trata de una experiencia híbrida que impulsa el tipo de compras más impulsivas, al hacer experimentar el producto al usuario de primera mano, sin necesidad de esperar a que llegue a su casa.