¿Qué es y cómo aplicar benchmark en el marketing online?

¿Tienes curiosidad por saber por qué tus competidores consiguen mejores resultados, cuáles son sus puntos fuertes y cómo podrías imitarlos? El benchmark proporciona respuestas a estas preguntas. Te contamos qué es y cómo aplicarlo a tu negocio.

¿Qué es benchmark?

El benchmark es un proceso en el que se compara el rendimiento de una empresa con el de su competencia, en concreto, con el negocio que está considerado como líder en la industria. El objetivo de hacer benchmark es identificar posibles puntos de mejora, analizando qué es exactamente lo que el competidor está haciendo bien para lograr mejores resultados y comparándolo con los procesos internos del negocio que se quiere impulsar.

De este modo, a través del benchmark, es posible perfeccionar procesos e impulsar el rendimiento de un negocio y sus productos o servicios. En otras palabras, la técnica ayuda a las empresas a identificar por qué motivo hay una brecha entre el punto en el que está el negocio y aquel que aspira a alcanzar.

Si bien algunas mejoras aplicadas tras el proceso de benchmark incluyen cambios en el producto o servicio, estas transformaciones pueden pasar asimismo por la digitalización de una empresa, por ejemplo.

¿Cómo aplicar benchmark en el marketing online?

El benchmark puede ser aplicado al marketing online de una empresa, de modo que se identifiquen los cambios necesarios para lograr los mejores resultados. El proceso de benchmark en marketing online podría resumirse en los siguientes pasos:

1. Medir dónde está la empresa ahora y establecer objetivos

Para empezar, debes conocer la situación real de tu empresa respecto al marketing digital. Mide tus acciones en este campo teniendo en cuenta su frecuencia, cómo responde el público y qué posibles efectos han tenido en tu negocio. Conviene centrarse en actividades concretas, como tu estrategia en redes sociales o el SEO de tu página web, de modo que sea posible compararlas con las de tu competencia. Este es también el momento para definir métricas cuantificables y objetivos.

Por ejemplo, un objetivo podría ser alcanzar la primera página de resultados de Google para cierta palabra clave. Define asimismo las métricas en las que vas a fijarte. Si tu opción es enfocarte en los contenidos, el experto en contenido Neil Patel destaca las 3 métricas más importantes: el tráfico, el posicionamiento en buscadores y el tiempo de permanencia en la página web. No obstante, es esencial que adaptes esta información a tu negocio y los objetivos que busca.

2. Define a tu competencia y mide dónde está

Una vez analizado tu negocio, debes seguir el mismo paso con tu competencia, eligiendo un negocio exitoso para comparar sus procesos y métricas con el tuyo. Asegúrate de elegir un competidor real, que tenga un presupuesto en marketing similar al tuyo y que se dirija al mismo público. Después deberás conseguir las métricas del competidor en las áreas que hayas decidido medir.

Por ejemplo, si uno de tus objetivos es impulsar tu SEO, deberás fijarte en la posición actual de tu competidor en este punto y su rendimiento de acuerdo a las palabras clave que utiliza. Existen múltiples herramientas que te permiten acceder a esta información sobre tu competencia, como Buzzsumo (para marketing de contenidos), Agorapulse (para la estrategia en redes sociales) o SEMRush (para el posicionamiento en motores de búsqueda).

3. Compara tus métricas y las de tu competencia

La eficacia del benchmark consiste en que los números pueden desvelar el motivo por el que una empresa es exitosa en un área concreta, y qué puede hacer tu negocio para acercarse a esa meta. En este punto, es el momento de realizar un informe en el que cotejar de forma objetiva dónde está tu negocio ahora en comparación con tu competencia. A partir del informe, es posible identificar en qué flaquea y definir un plan de acción con actuaciones concretas.