¿De qué es capaz la Inteligencia Artificial? Algunos ejemplos

Las tecnologías vinculadas a la Inteligencia Artificial (IA) están permitiendo no solo aumentar la eficiencia hasta niveles nunca antes experimentados, sino también el acceso a información muy valiosa en la búsqueda de mejoras en productos y procesos. Todo ello lleva a un impulso de la productividad muy notable: en algunas industrias, como la energética o los servicios públicos, la Inteligencia Artificial ya ha empujado la productividad en hasta un 5,5%.  Pero, ¿qué utilidades concretas presenta la Inteligencia Artificial? Te contamos cómo las empresas ya están utilizando esta tecnología para mejorar sus operaciones.

¿Qué es la Inteligencia Artificial? Definición 

La Inteligencia Artificial supone la capacidad de los sistemas informáticos y máquinas de desarrollar capacidades vinculadas a la razón, la planificación, el aprendizaje y la creatividad. Es decir, de imitar las capacidades cognitivas humanas y aplicarlas a la percepción de su entorno para resolver problemas.

¿Qué pueden hacer las máquinas con Inteligencia Artificial?

• • Procesamiento del lenguaje. En el proceso conocido como Natural Language Processing, los sistemas están aprendiendo a analizar, comprender y generar el lenguaje humano.

 

• • Visión. Esto permite a las máquinas reconocer patrones visuales y comprender qué representa una imagen o un vídeo.

 

• Aprendizaje automático. Los sistemas computacionales pueden “aprender” de sus propios procesos, mejorando sus resultados en el tiempo. Para ello, analizan cantidades ingentes de datos y descubren qué procesos ofrecen los mejores resultados, para después replicarlos.

 

Usos de la Inteligencia Artificial en diferentes industrias

Medicina

La Inteligencia Artificial se está aplicando en medicina para generar tratamientos personalizados y, por tanto, más eficaces para los pacientes. También es útil en la lectura de rayos X o en la generación de automatizaciones que alerten a los pacientes sobre cuándo deben tomar un medicamento.

Ventas

Como hemos señalado antes, la Inteligencia Artificial puede analizar grandes cantidades de datos, una cualidad que se puede aprovechar para la prospección de ventas. Así, esta inteligencia puede procesar bases de datos masivas para identificar a los mejores clientes potenciales en el terreno B2B. En el terreno de las ventas minoristas, la Inteligencia Artificial permite generar experiencias de compra personalizadas y, por tanto, con más probabilidad de ser exitosas. También es útil en la gestión de stock de tiendas online o para el diseño de tiendas online más eficaces.

Manufactura de productos

La Inteligencia Artificial está ya al mando de muchos procesos productivos, proporcionando análisis de datos útiles en áreas como la gestión de stock o el mantenimiento predictivo de equipos.

Entidades financieras

Bancos y otras entidades financieras ya están pudiendo aprovechar el potencial de la Inteligencia Artificial en numerosas áreas. Por ejemplo, mecanismos de IA son capaces de identificar las transacciones que son potencialmente fraudulentas o de automatizar tareas repetitivas, como la introducción de datos. 

Marketing y atención al cliente

Las automatizaciones en marketing vinculadas a la Inteligencia Artificial están jugando un papel clave en la capacidad de las empresas de llegar al público adecuado. En este campo, la IA ya está siendo útil para escribir textos y traducirlos, generar interacciones personalizadas con los clientes o ayudar a los negocios a decidir qué tipo de campaña es más eficaz para dar a conocer sus productos o servicios.  Es más, la aplicación de la Inteligencia Artificial a marketing y ventas ha supuesto el impulso a los procesos de automatización de marketing o marketing automation con herramientas ya indispensables como los software CRM.