Para llevar a buen término cualquier idea, resulta primordial que, en todo momento, es decir, desde los primeros pasos hasta los últimos, pasando por los intermedios, tengas muy claro lo que quieres conseguir. Una frase típica que nuestros padres nos han dicho hasta la saciedad es que apuntemos todo lo que tenemos que hacer, para que así, no nos apartemos del camino. Y, realmente, tienen razón, si tus objetivos aparecen reflejados en un documento, te será más fácil organizar tu tiempo para llegar a todo.

Pues bien, el plan de empresa de tu negocio bebe directamente de la esencia de la enseñanza familiar del pasado párrafo, aunque, como es evidente, con una serie de particularidades, que te detallamos en este artículo.

 ¿Qué es un plan de empresa?

Se trata de una herramienta fundamental específicamente creada para tres momentos importantísimos de tu negocio: la puesta en marcha, la expansión y, también, si atraviesas situaciones de crisis o estancamiento, para encauzar la actividad de tu PYME.

Asimismo, en tu plan de empresa deberás identificar, describir y analizar la conveniencia de crear tu negocio, en base a tu idea, estudiar la viabilidad económica, financiera y técnica y, dejar constancia de todas aquellas tácticas para que esa conveniencia u oportunidad de negocio se transforme en un proyecto preciso.

Por tanto, un plan de empresa es un documento donde describes tu proyecto y explicas cómo hacerlo realidad a partir de una serie de variables (escenario, elementos diferenciadores, competencia...), previamente analizadas. Además, tiene otro cometido fundamental, el de carta de presentación para captar financiación o colaboraciones puntuales.

¿Para qué sirve un plan de empresa?

Un plan de empresa es una herramienta fundamental para estructurar una idea de negocio y convertirla en un proyecto viable. Sirve como hoja de ruta que permite:

  • Definir los objetivos y la estrategia de la empresa.
  • Analizar el mercado y la competencia.
  • Planificar las áreas clave como marketing, operaciones y finanzas.
  • Anticipar riesgos y establecer planes de acción.
  • Presentar el proyecto ante inversores, entidades financieras o socios.

Importancia de elaborar un Plan de Empresa

Hay varias razones por las que un negocio debe considerar el elaborar un Plan de Empresa:

  • Supone un análisis previo a la viabilidad de una empresa de nueva creación o a una transformación exhaustiva de un negocio. De este modo, evita lanzarse a emprender sin haber considerado todos los factores.
  • Consiste en una carta de presentación muy valiosa para presentarlo a posibles opciones de financiación, incluyendo Business Angels o empresas de Capital Riesgo.
  • Es una herramienta de gestión. Siempre puede se puede acudir al documento para monitorear si se están siguiendo las proyecciones y se avanza conforme a los objetivos.

Los puntos esenciales que debe contener tu plan de empresa

Un plan de empresa puede asemejarse, por forma e intención, a un curriculum vitae, puesto que, aunque también sea un documento para ti, en algún momento, deberás emplearlo como una carta de presentación para inversores. Por ello, además de contar con una información precisa, real y pormenorizada, deberás estructurarla de tal manera que la lectura resulte atractiva. Asimismo, nunca está de más la inclusión de imágenes, gráficos o esquemas. Tras estos breves apuntes y sin más dilaciones, pasamos a enumerar los rasgos principales de todo plan de empresa:

  • Presentación de tu idea y el negocio con el que la llevarás a cabo. En este apartado, explicarás en qué consisten tanto tu idea de negocio como la empresa para ponerla en marcha y las ventajas competitivas de tu producto o servicio.
  • Descripción de los promotores. Aquí deberás incluir el currículum de tus socios, destacando de los mismos aquellas competencias relacionadas con la actividad del negocio que quieres emprender.
  • Análisis DAFO, es decir, un estudio sobre las debilidades y fortalezas de tu empresa, relacionadas con las oportunidades y amenazas que encara, según el mercado, el entorno, la competencia o el comportamiento de los consumidores. Además, deberás incorporar todas las estrategias para poner solución a los problemas y alcanzar tus objetivos.
  • Forma jurídica de tu negocio y justificación de dicha elección. Según la forma jurídica que escojas, tu empresa tendrá una u otra organización.
  • Análisis de mercado de tu sector y de tu público potencial según el ámbito geográfico en el que te muevas.
  • Organización interna. Todo lo que necesitarás para producir tu bien o servicio.
  • Plan de comercialización y marketing, tanto empresarial como comunicacional o, lo que es lo mismo, tu estrategia comercial según las cuatro pes: precio, promoción, producto y punto de comercialización.
  • Análisis económico y financiero para demostrar la viabilidad de tu PYME. El mismo título lo dice todo. Por tanto, solo nos queda añadir que este análisis debe ofrecer un balance realista.
  • Financiación, en el sentido de dejar claro de dónde procederá, cómo será devuelto y las condiciones del mercado.
  • Pasos a seguir. Resulta recomendable que realices una agenda de todos los trámites a seguir para constituir y poner en marcha tu negocio.
  • Anexos. Aquí incluirás todos aquellos documentos que creas pertinente aportar, pero que no tienen cabida en ninguno de los puntos anteriores.

¿Cómo hacer un Plan de Empresa?

El Plan de Empresa se divide en las siguientes partes, sobre las que las personas encargadas deberán reflexionar y documentarse:

Análisis de la situación actual

En este punto se define el tipo de mercado en el que se integra la empresa y se determina si existe un mercado objetivo para el negocio. Además, se incluye un análisis DAFO y un estudio exhaustivo de la competencia.

Objetivo del negocio

Es vital aquí definir de forma exacta la propuesta de valor de la empresa y su modelo de negocio, incluyendo los productos o servicios que se ofrecen. A su vez, es indispensable incluir una proyección sobre cómo se prevé que evolucione el negocio, cuáles son sus objetivos y la estrategia a seguir, además de definir la ventaja competitiva del negocio (especialización, competencia en costes…).

Plan estratégico

En este punto se detallan las acciones concretas que van a permitir a la empresa alcanzar los objetivos expuestos en el punto anterior. Aparece aquí:

  • Plan de marketing, que examina el público potencial del negocio y los modos de alcanzarlo.

  • Área de RRHH, detallando los empleados de la empresa y sus funciones, el organigrama y las políticas de gestión de empleados.

  • Plan de producción, que describe la logística necesaria para poner en marcha el negocio o mejorarlo.

Plan financiero

Este epígrafe incluye todo lo necesario para comprender qué vías de financiación se van a elegir, la inversión necesaria y la rentabilidad prevista. Entre otras cuestiones, en este punto no pueden faltar la inversión inicial, las proyecciones de ingresos y gastos para los siguientes años, el plan de amortización, la cuenta de resultados, el balance y el flujo de caja.

Otros

Es asimismo recomendable incluir un plan de contingencias (en el que se prevean actuaciones ante situaciones adversas) y un plan jurídico (sobre todo para las empresas de nueva creación, ya que aquí se detalla la forma jurídica de la empresa y los trámites para ponerla en marcha).

Además, el resumen ejecutivo en el Plan de Empresa debe incluir un compendio de la información anterior más relevante.